Tecnología para ‘ver’ el viento: la Copa de América usa un sistema basado en sensores y algoritmos que trasciende la retransmisión deportiva
Con más de 170 años de vida –nacido en 1851 en Reino Unido, se trata del trofeo deportivo internacional más antiguo del mundo– la Copa de América de vela ha experimentado, como es lógico, una completa transformación desde el punto de vista técnico, fundamentalmente en lo que respecta a los materiales y estructura con las que se elaboran los propios barcos, en la actualidad ligeros catamaranes que, literalmente, vuelan sobre el agua. Desde el punto de vista de la retransmisión y visionado del evento, por parte, respectivamente, de los periodistas deportivos y los espectadores, los avances, claro está, también han sido significativos en los casi dos siglos de vida de la carrera, en los que no sólo irrumpieron los tradicionales medios de comunicación sino también internet. No obstante, los organizadores de la actual Copa de América –oficialmente Louis Vuitton 37ª America’s Cup–, que se celebra desde el 22 de agosto hasta el próximo 22 de octubre en Barcelona, querían renovar la forma en la que se retransmite y visiona este evento deportivo, el más visto en todo el planeta, tras el Mundial de Fútbol y las propias Olimpiadas.
“La organización de la Copa de América nos propuso un reto: mejorar la experiencia de usuario de los espectadores y los comentaristas de la regata y lo hemos conseguido con una tecnología que permite visualizar y simular el comportamiento del viento, una fuerza que todos podemos escuchar y sentir pero nunca ver… hasta ahora”, explicaba ayer en Barcelona, en un reducido encuentro con prensa al que fue invitado CIO ESPAÑA, Xavi Navarro Muncunill, responsable técnico de tecnología de realidad extendida de Capgemini Engineering España, el negocio de ingeniería de la consultora francesa que es este año una de las patrocinadoras de la carrera náutica.
El proyecto, iniciado junto a la Universidad de Canterbury de Nueva Zelanda –cuyo equipo resultó ganador en la anterior competición–, se ha realizado en un tiempo récord de apenas ocho meses y con un reducido equipo de 37 ingenieros de la consultora procedentes de España –que ha tenido un “papel protagonista” al desarrollarse la competición en Barcelona–, Francia, Reino Unido, Portugal y Ucrania. ¿El resultado? En una pantalla, es posible visualizar el viento y cómo varía a lo largo del campo de la regata en tiempo real en directo, lo que, recalcan desde la compañía, los aficionados y comentaristas pueden entender mejor las rutas que siguen los barcos y las tácticas de los equipos.